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ARAS DE LOS OLMOS-TITAGUAS

CAMINANTES, 36: Pep Alcácer, Meitos, Alonso, Vicen, Pepe Puyol, Amparo Macián, Concha, Vergara, Angels, Pilar, Enri Tormo, Julian, Mari-Paz, José Tobarra, Julio, Miguel Bort, Rafa Figueres, Manolito, Ricardo, Guiller, Ramón, Manuela, Amparo, Alberto, Maribel, Renau, Karl, María, Pedro Fuentes, Maribel Rueda, Eloy Arcas, Jose-Vicente, Novella, Montiel, Manolo Vidagany y Juan Antonio.

NOTA. La crónica está copiada-pegada del libro: GR-37-La Serranía de Teresa Casquel.

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Para comenzar a caminar por el GR-37 salimos de Aras de los Olmos por la calle que enfrenta al restaurante de Los Tornajos. Dejamos el pueblo por el camino del cementerio viejo.
Bordeamos la tapia del cementerio viejo por la izquierda. Más a la izquier¬da se queda el camino del Molino del Marqués. Subimos ligeramente en dirección al cementerio nuevo y al bosque por una ancha pista cementada que se dirige a La Travina.
A nuestra derecha se queda el polideportivo, y el complejo turístico Aras Rural con pequeñas cabañas de madera y un hotel de estilo alpino.

8′ 653 m
Pasamos el camposanto que dejamos a la izquierda: en esta zona hubo un descansadero de ganado; nos encontramos en el Paso de las Ánimas o Medio, vía pecuaria que comunicaba el pueblo con el Cordel de Castilla. Este camino trashumante fue utilizado hasta los años 60 por pastores que llega¬ban hasta aquí desde Castilla-La Mancha para proseguir hacia la costa valenciana donde invernaban.
Un centenar de metros más adelante, una senda ataja y evita una pronun¬ciada curva de la pista.
Cuando volvemos a ella, en vez de continuar por la pista, siguiendo las indica¬ciones de un poste señalizador, la cruzamos, y continuamos por un camino que con dirección S. sube hacia el Alto de La Sarteneja en la partida de Las Lomas (1030 m). Llegamos a la parte alta del montículo donde se aclara el bosque.
11′-19′ 716 m – 1369 m
Dejamos este camino para torcer hacia la izquierda por un sendero; es el Cordel de Castilla, vía pecuaria que proviene de Santa Cruz de Moya en la cercana provincia de Cuenca.
Nos volvemos a desviar a la izquierda para tomar dirección E-SE; bajan¬do por la cuesta aparece a la izquierda Aras de los Olmos.
2′ – 21′ 122 m – 1491 m
A media ladera encontramos un horno de cal casi en ruinas, construcción muy abundante en la zona.
Continuamos por el Cordel de Castilla bajando hacia una pista.
11′-32′ 750 m – 2241 m
La vía pecuaria cruza “el carril” por un vado (960 m): así denominan los vecinos de Aras de los Olmos a este camino forestal que se dirige al Molino Marqués; sigue el itinerario con dirección S.E., y cruza el barranco del Carril (éste desemboca en la Cañada del Marino, que a su vez lo hace en el barranco del Batán y éste en el río Turia).
Subimos la loma del Carril, primero por una trocha con dirección S., más tarde cruzamos un camino que se pierde en un campo de almendros y con¬tinuamos ahora por senda, adentrándonos en un bosquecillo; a la derecha quedan campos de almendros.
12′ – 44′ 775 m – 3016 m
Salimos del bosque a un camino ancho; nos dirigimos hacia la izquierda por dicho camino.
2′ – 46′ 163 m – 3179 m
Dejamos la pista un poco más adelante, y giramos por una senda a la derecha, justo antes de un cruce de caminos; la vía pecuaria coincide aquí con el antiguo camino de la Burguesa que bordea la Cañada del Marino, dirección S-SE.
12′ – 58′ 873 m – 4052 m
Cruzamos la Cañada por uno de los campos abandonados donde se ha efec¬tuado recientemente una plantación de pinos jóvenes. Nos adentramos en la espesura del bosque, el patrimonio forestal de Aras es una de sus mayores riquezas ya que éste constituye el 58% de la superficie municipal.

11′ – Ih 9′ 823 m – 4875 m
La senda atraviesa un cortafuegos continuando por un camino hasta llegar a una pista con buen piso; la tomamos hacia la derecha dirección W, bajan¬do ligeramente.

8′ – 1 h 17′ 415 m – 5290 m
Unos 300 m más adelante dejamos la pista, antes de llegar a los corra¬les de la Burguesa o Tejada, por un camino a la izquierda entre pinos.

6′ – 1h 23′ 310 m 5600 m
Dejamos la trocha por la que bajamos, para desviarnos a la izquierda hacia el barranco del Regajo.
Llegados al lecho del barranco (810 m), andamos por un sendero que junto al cauce lo remonta hacia unas grandes piedras que obstaculizan el paso. En este punto lo cruzamos y ascendemos por una senda.
El agua de lluvia desaparece rápidamente entre las fisuras del relieve cal¬cáreo, por lo que es difícil encontrar corrientes de agua superficiales; una vez en el interior comienza una labor erosiva que va socavando las apa¬rentemente impenetrables entrañas del paquete pétreo. Simas, cavernas y conductos subterráneos son un estadio de este proceso, cuyo resultado final es la total destrucción del macizo.

7′ – 1 h 30′ 582 m – 6182 m
El sendero termina en otro más ancho; aquí hay un poste indicador del GR-37 y del SL-V 22; por éste último se puede regresar a Aras de los Olmos por el interesante camino del Molino de La Jarra; continuamos por el GR en dirección ascendente, por la ladera opuesta a la que hemos bajado.
La senda por la que hemos subido, desemboca en el camino de La Losa; lo tomamos hacia la izquierda; a unos 100 m dejamos el camino forestal, tomando a la derecha un azagador utilizado por los pastores de la zona para llevar a abrevar su ganado al río; ascendemos levemente por la cañada del Tío Burriel, hacia la cabecera de la pequeña vaguada.
10′ – 1 h 40′ 698 m – 6880 m
Desemboca la senda en unas labores abandonadas; tomaremos en este punto dirección S-SE; las bordeamos por la izquierda; llegamos a un cami¬no más ancho; dejamos una caseta de pastor a la izquierda.
Atravesamos unos extensos campos de cereal, en una segunda caseta o barraca que se conserva en muy buenas condi¬ciones, tuerce el GR a la izquierda, dirección NE. Caminamos por un pequeño bosquete.
15′ – 1 h 55′ 955 m 7835 m
Dobla el camino a la izquierda por un carril paralelo a una ancha pista; lo continuamos unos 500 m dirección E-NE; un poco más ade¬lante se incorpora un camino por la derecha, continuamos en la misma dirección.
Llegamos a una encrucijada; de frente, una pared; a la izquierda quedan “Las Pozas” un lugar donde había una fuente, balsa y unos altos chopos, pero que en la actualidad no tiene agua; de todos modos es un buen lugar para descansar a la sombra, desviándonos unos m del itinerario.
El GR, desde la bifurcación, conti¬núa hacia la derecha llegando a la pista que atraviesa La Mailesa y baja al Molino Quemado; una vez en el camino forestal lo tomamos hacia la izquierda dirección NE.
A unos pocos m abandonamos el ancho camino para tomar, a la derecha, dirección S, un anti¬guo azagador de ganados que sube entre un campo de almen¬dros y una zona de bosque.

13′ – 2h 8′ 960 m – 8795 m
Tras cruzar un cortafuegos (950 m) llegamos a los corrales de Matutano, donde todavía se guarda ganado.
Cruzamos unos campos de almendros en dirección SE, hacia el bosque y el inicio de la Cañada Larga.

13’ -2 h 21’ 1105 m – 9900 m
Llegamos a una ancha pista en la Cañada Larga; la tomamos hacia la izquierda, la seguimos unos 200 m.
En una pronunciada curva salen a la derecha dos caminos; hay que tomar el de más a la izquierda dirección E; cruzamos una zona de fuerte erosión, acarcavada, sobre arcillas y margas.
5’ -2 h 26’ 375 m – 10275 m
Después de atravesar un campo de almendros conectamos con otro cami¬no que, hacia la izquierda, desemboca en la ancha pista que hemos dejado antes; nosotros nos dirigimos a la derecha en leve subida bordeando unos campos hasta que, tras unos 150 m, nos adentramos en el bosque por una senda que lo atraviesa para salir al camino de la Cañada Larga.
Tomamos este carril dirección S, y llegamos inmediatamen¬te a un cruce de pistas; en este punto giramos dirección E para rodear una casa re¬cientemente restaurada.
Junto a la casa se inicia un antiguo camino que nos lleva hasta la llamada ermita de San Gregorio; antes de llegar a ella cruzamos el barranco del Raga.

14′ – 2h 40′ 1240 m – 11515 m

ERMITA DE SAN GREGORIO (800 m) Se levanta en 1805 un pilar con capillita, después de encomendarse el pueblo de Titaguas al santo para extirpar la oruga de la viña o una plaga de langosta -según versiones- y remitir ésta; aquel monu¬mento fue derribado en la Guerra Civil Española destruyéndose la imagen del santo, y más tarde se levanta el actual a pocos metros del original; no parece que hubo nunca una verdadera ermita en este lugar.
Nos encontramos otra vez ante una encrucijada de pistas; hay que tomar justo la de enfrente, la que se dirige hacia una granja de conejos.

“TRAMA” MONUMENTAL

Antes de la granja podremos admirar un magnífico ejemplar de porte arbóreo de Quercus coccifera o coscoja llamado en Titaguas “trama”.
Una forma muy fácil de distinguir la coscoja de la carrasca es que las hojas de ésta tienen el envés grisáceo y en la cos¬coja ambas caras tienen el mismo color; las bellotas de la coscoja tienen la envol¬tura con pinchos; la de la carrasca no. Pasamos al lado de una caseta o barra¬ca después de la granja.

10′ – 2h 50′ 868 m – 12383 m
Unos m más adelante, después de cruzar el barranco de la Tejería, nos desviamos de la pista hacia la derecha para subir, por una trocha de gana¬do hacia la Ceja de los Morales; allí cruza el SL.V 30 cuyo trazado coincide
con el GR hasta el mismo Títaguas; al trasponer este cerro tenemos a la vista el pueblo.
Pasamos junto a un navajo y, como fondo una estación de residuos sólidos junto al helipuerto utilizado por los servicios forestales; desde allí tomamos el camino de los Morales, asfaltado en la actualidad, que nos lleva hasta la población. Un poco antes de llegar, queda el polideportivo a la derecha, y la recién estrenada zona de acampada de “Las Oliveras”, a la izquierda.
10′ -3h 507 m – 12890 m
Llegamos a Titaguas (837 m) por la fuente Vieja; aquí hubo un lavadero y en una losa aparece el escudo de Titaguas y la fecha de 1637; es un buen lugar para descansar y refrescarnos.

A la vera del camino, Hay una fuente de piedra,
Y un cantarico de barro -glú glú- que nadie se lleva.
Adivina adivinanza
que quieren decir la fuente,
el cantarico y el agua,
Antonio Machado

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