LA MARJAL DELS MOROS
EL PUIG
CAMINANTES, 25: Carmen, que fue la guía, María, Pedro Fuentes, Meitos, Alonso, Vicen, Pepe Puyol, Carolina, Manuela, Amparo Macián, Angels, Pilar, Mere, Isabel con Luca, Vicenta Ruiz, Tito, Fina León, Manolito, Pep Alcácer, Concha Sequeiro, Amparo Mora, Vicent Martí, Ramón, Manoli y Juan Antonio.
No viene mal que, por una vez, hagamos un recorrido llano; en todo caso, una ruta diferente a lo habitual.
Nos reunimos en La Playa de El Puig; llegando desde el pueblo a la playa, en la última rotonda, que tiene una barca azul. Unos 100 m a la izquierda hay espacio para aparcar. Iniciamos la marcha a las 9:10 horas por la orilla de la playa hacia el norte. Cruzamos una acequia a las 9:25 y 5’ después, ligero desvío a izquierda para cruzar el puente sobre Barranco de El Puig, volver otra vez al paseo marítimo, y entrar en Puçol.
Se termina la zona urbanizada, también el término de Puçol, y entramos en término de Sagunto a las 10:00, encontrando a izquierda un mapa del paraje natural La Marjal dels Moros y un poste con el núm 1.
Seguimos caminando con el mar a la derecha, junto a un pequeño montículo creado para impedir que el agua salada del mar penetre en la marjal. A las 10:10, encontramos el primer puesto de observación, con el poste núm 2. Desde su torreta, por encima de las cañas, se tiene un poco de perspectiva del conjunto del humedal. El siguiente observatorio, lo tenemos 15’ más tarde, poste núm 4, y seguimos todavía por la orilla del mar.
A las 10:40 entramos en el Grao Vell –la zona antigua del Puerto de Sagunto, antes de convertirse en zona industrial. En las primeras casas, pequeñas, de una sola planta, y blanquísimas, está “Casa Nelo”, y a la derecha, una ermita dedicada a la Verge del Bon Succés. Almorzamos al final de la calle, junto a un torreón de defensa costera que, según google, data del siglo II a.c.
Reanudamos la marcha a las 11:10, volviendo atrás hasta el último mirador. Pasado éste, y unos 30 m después de una acequia, a la izquierda hay un panel y el poste núm 3, Enfrente, es decir, a nuestra derecha, tomamos una senda que se interna en la marjal, y discurre un buen tramo, sobre pasarelas de madera.
Subimos al siguiente mirador que encontramos con poste num 6, y a las 11:50, rechazamos un carril a derecha. 5’ después, cruzamos una pista, para subir al siguiente punto de observación, poste núm 7, seguramente en el punto más alto del paraje (estará por lo menos unos 3 m sobre el nivel del mar). Hacia el interior tenemos una preciosa vista del Monte Picaio y El Garbi, y alrededor la planicie de la marjal ; lejos, los edificios. Las pocas aves que se dejan ver en las lagunas, se alejan de los visitantes. Desde el mirador, por el lado opuesto, desciende un camino que lleva al Centro de información del parque.
Tras unos 5’, volvemos atrás hasta la pista que tomamos a derecha. Rechazamos otro camino a derecha a las 12:05 en un lugar con mesas y un gran árbol, que, por consenso, decidimos no era un pino, pero nadie supo qué tipo de árbol es. Seguimos recto y en 10’ pasamos junto a una nave abandonada, con balas de paja, también abandonadas, en el antiguo sequer.
Aquí el camino gira a derecha y enseguida encontramos el poste núm 10; el núm 11, con otro mirador y algunas mesas, lo hallamos a las 12:25. Al poco nos tropezamos con un rebaño de ovejas; el pastor llevaba en la mano un corderito que acababa de nacer. Nos abre una puerta metálica que cierra el camino, y desvío a izquierda. Apenas 5’ después, nuevo desvío también a izquierda.
Seguimos entre dos acequias de aguas bastante sucias, pasamos por el poste núm 13, con mirador, a las 12:45, y termina en el paseo marítimo junto a la estación de bombeo y los adosados, 10’ después.
Giro a la derecha, y por el mismo itinerario que a la ida, llegamos a los coches a las 13:50 horas, tras 18,6 km recorridos.
Manoli
