RIO EBRON-CASCADA CALICANTO
EL CUERVO-TORMON
CAMINANTES, 25: Vergara (el guía), Concha Sequeiro, Eduardo, Fina, Manolito, Sara, Eladio, Meitos, Alonso, Vicen, Pepe Puyol, Manolo Vidagany, Amparo Macián, Manuela, Angels, Pilar, Francis Marco, Inma Peris, Pepe Renau, Concha Alcocer, Pep Alcácer, Ballester, Karl, Manoli y Juan Antonio.
Ya nos pareció espectacular este recorrido, la primera vez que lo vimos en 2/11/2002; en otoño, tiene un atractivo especial, pero cualquier época es buena. Hoy, introdujimos una variante, y acompañó la climatología.
Nos reunimos en el parking de Casa Domingo de Ademuz a las 9:00 -hay que madrugar- y seguimos por la N-330, hasta tomar el desvío a la N-420, dirección a Catielfabib-Cuenca; después la CV-479, a Castielfabib-El Cuervo. Llegados a este último, sin tomar la primera entrada al casco urbano, y pasadas las últimas casas que hay junto a la carretera, unos 500 m después de éstas, tomamos un desvío a la derecha con una indicación en tablilla de madera, a “Estrechos del Río Ebrón”. Al principio asfaltado, después de tierra, con vado sobre el río incluido, al cabo de unos 2 km, se termina en una pequeña zona con mesas, y aparcamos.
Iniciamos la marcha a las 9:45, por la margen izquierda, remontando el río. Se cruza el cauce varias veces, pero ya no hay piedras o troncos para hacerlo; pasarelas de madera o metálicas bien construidas, permiten el paso cómodamente.
Llegamos a los Estrechos a las 10:10, que se pueden salvar –sin mojarse- gracias a las pasarelas laterales. Tras las inevitables fotos, seguimos. A las 10:30 hay que salvar un desnivel, en descenso, para lo que hay colocados unos escalones metálicos, y un cable adosado a la roca. Parece más difícil o complicado, de lo que resulta en realidad, y más fácil aún, en sentido contrario, aunque sí se ralentiza la marcha. Poco después, cruzamos el río por una pasarela metálica, por última vez en la ida, y se inicia un continuado ascenso, apartándose del cauce.
En la bifurcación que encontramos a las 10:55, tomamos a derecha hacia “Puente Fonseca-Tormón” (a izquierda, también se va a Tormón). Paramos a almorzar en el fondo de la vaguada que aquí se forma; hasta las 11:20.
Unos 400 m después de la vaguada, encontramos el Puente Natural de la Fonseca; unos metros antes, indicada con una tablilla, hay una senda para bajar al fondo, cosa que esta vez no hacemos. Desde el puente hay un excelente mirador del cañón. Seguimos el sendero, sin cruzar al otro lado, en dirección a Tormón, y llegamos a una pequeña explanada a las 11:45. Desde aquí parte una senda a izquierda a un mirador, y hay una buena vista de Tormón, casi confundido con el paisaje. Rechazamos aquélla y paramos unos momentos para reagrupar.
Continuamos de frente por un carril ancho y cuando se termina el descenso y el camino sigue en llano, tomamos una senda a derecha, indicada con una fita de piedras, que nos lleva hasta un camino que discurre por el fondo del barranco de la Tejería. Siguiéndolo hacia la derecha, nos lleva hasta su desembocadura en el río Ebrón; remontamos su curso por la margen derecha y después de rebasar los restos de un molino, encontramos la cascada de Calicanto. (12:10 h-1040 m/a).
Espléndida, preciosa, aunque en esta ocasión no estaba muy caudalosa, es impresionante. Como el cauce no es profundo, cruzamos por las piedras para poder hacer fotos y fotos.
Después de unos 15’, regresamos. La variante, la tomamos cuando encontramos de frente unos farallones, en el punto donde desemboca el barranco de la Tejería; el río forma un ángulo a izquierda, y seguimos su curso, por una senda muy clara, aunque no señalizada.
Discurre un tramo en llano, y pronto se va elevando sobre el cauce, quedando el lecho del río muy lejos en el fondo, formando unos estrechos impresionantes, no accesibles, si no es por el agua. Algunos miradores, acondicionados con barandillas, permiten su observación.
A las 13:15 llegamos al Puente de la Fonseca; esta vez, sí lo cruzamos, y por el mismo itinerario de la ida, regresamos a los coches, donde llegamos a las 14:25 horas, después de 11,4 km recorridos.
Manoli
