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Penyagolosa-Rodeando el macizo-28-05-2011

 

Día 28 de Mayo de 2011

 

Rodeando el macizo

Penyagolosa

 

 

Enlace a este mapa

http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?&id=1740687

 

CAMINANTES, 30:  Vicenta Ruiz, Chelo con Trufo y Tito (que vienen desde Buñol), Manolito, Fina León, Ballester, Karl, Maria José, Julio, Concha, Vergara, Rafa Figueres, Manolo Vidagany, Mere, Pedro, Sara, Eladio, Pepa Balaguer, Moisés, Angels, Pilar, Asunción, Maribel, Renau, Juan Pérez, Julia y Amparo Sala, Novella, Manoli y Juan Antonio. Hoy estaba yo de guía, pero quien descubrió este precioso itinerario, y lo propuso para incluir en la programación, fue Novella; un 10, Novella. Perfecto como cierre de la temporada.

          En primavera, el tiempo está loco. A mitad de semana, se registraron 37ºC; ayer viernes, hubo tormentas importantes, y durante del desplazamiento estuvo lloviendo buena parte del trayecto, por no decir la espesa niebla que había entre Adzeneta y Vistabella. Pero fue pasar este pueblo, dejó de llover,  vimos el sol, y toda la mañana tuvimos una excelente temperatura que no sobrepasaría los 20ºC. Suerte!

          Nos reunimos, unos 200 m antes de  la explanada del santuario en Sant Joan de Penyagolosa, a la entrada de un camino que sale a la izquierda, y por el que se accede al Barranc de la Pegunta y al Pic Penyagolosa. Dejamos un par de coches para optimizar las plazas, y seguimos por él 2,5 – 3 km, hasta el punto en que por la izquierda confluyen dos caminos, y hay un poco de ensanche. Aquí aparcamos el resto.

          Iniciamos la marcha a las 10:30 por el mismo camino que llegamos; poco más adelante una cadena, impide el paso a vehículos no autorizados. 7’ después, dejamos a izquierda la senda por la que se inicia la subida al pico, y a las 10:45, la masía de la Cambreta, a la derecha, un poco apartada del camino.  Se inicia a continuación un descenso en la pista, y tras 5’, la dejamos por una senda a izquierda que en unos 50 metros, nos lleva hasta la Nevera del Penyagolosa. No está derruida, como tantas que hemos visto, su pequeña cúpula, tiene un acceso cerrado, y está cubierta de musgo y hierba, y por el lado más bajo, otro acceso con portezuela metálica, también cerrada. Aquí almorzamos hasta las 11:15.

          Al reanudar, volvemos atrás hacia la pista, pero antes de salir a ella, tomamos una senda a la izquierda que desciende bruscamente entre el pinar.  La senda, aboca en una pista a las 11:33, que tomamos a izquierda. Apenas 1’ después, pasamos junto a la Fuente de El Paso, con un abrevadero largo construido en un tronco vaciado.

          A las 11:40, la pista se bifurca, y arranca una senda a la izquierda con una señal en poste de madera que indica dirección a “Cantal del Miquelet”; tomamos esta senda.

          La niebla ha seguido sobre nuestras cabezas, más o menos espesa y moviéndose según la lleva el viento; hacia las 11:55, en un momento bastante claro, caminamos hacia lo que parece una muralla de niebla, que, sin embargo, un tímido sol va deshaciendo según nos acercamos a ella, y que acaba disipándose por completo.  Otra señal de madera a las 12:00, nos indica que hemos llegado al “Cantal del Miquelet”.  Hacia el este, no hay visibilidad, y no podemos ver el mar, pero el macizo se aprecia en todo su esplendor, con sus franjas de colores entre el ocre y el rojo granate.

Hacemos una parada larga (8-10’) a las 12:30, y al poco de reanudar, un alambre atraviesa la senda para impedir que  salgan los animales; hay que pasar por un estrecho hueco, entre dos pinos jóvenes, a la izquierda.

          Luego encontramos la Cueva del Sastre, un aprisco, semicerrado, aprovechando el saliente de las rocas -12:50- y más adelante vamos llegando a la cabecera del barranco que llevamos a la derecha, rodeándolo hacia las 12:59; al otro lado del barranco hay una masía.

          En estos momentos ha vuelto a quedarse nublado, y vuelve a bajar la niebla,  parece que el sol ha salido el tiempo justo para que pudiéramos apreciar los colores de la montaña: Penyagolosa, la Montaña Mágica.

          Abocamos a una pista ancha a las 13:00; antes de salir a ella, seguimos a izquierda las señales de PR, que continúan en paralelo a aquélla, ascendiendo la ladera bruscamente y que la cruza varias veces para evitar los bucles del trazado para los vehículos. Atentos a las señales, no hay pérdida, y merece la pena seguirlas, porque el sendero es una delicia.

          Encontramos la Font de la Trobada a las 13:50; agua fresca y limpia, recogida por una tubería construida con un delgado tronco, que la deposita en otro más grueso.

          Salimos por última vez a la pista a las 14:10, justo en el mismo punto donde arranca la subida a la cima del pico; tomamos a la derecha y en 5’ más llegamos a los coches después de 10Km  recorridos hasta aquí.

          Algunos, sobre todo los que no tienen que bajar los coches, tomamos un carril que sale a la izquierda. Siempre descendiendo, y derivando a la derecha, nos introduce en el Barranc de La Pegunta, que, como el resto de la montaña, está espléndido, con una alfombra verde y cubierta de flores. Tras alcanzar la fuente del mismo nombre, a las 14:45, vamos siguiendo el riachuelo que forma, y salimos a la pista a las 14:55; 5’ más por ella, llegamos al primer punto de aparcamiento, y otros 5’ más a la explanada del santuario.

          Comimos en el restaurante; muy bien.

Manoli

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